Sociedad
150 guatemaltecas donaron 730 pulpos tejidos para los recién nacidos del Hospital Roosevelt, gracias a la iniciativa y los beneficios que aportan.
¡Sin duda las buenas acciones son algo que deben replicarse! Tal es el caso de 150 guatemaltecas que donaron 730 pulpos tejidos para recién nacidos del Hospital Roosevelt. Esta iniciativa fue impulsada por un grupo de mujeres que han puesto mucho amor a lo que hacen.
Estuvimos en entrevista con una de las mentes que tuvo la idea y nos contó una linda historia que nos llenó de mucho orgullo:
Lindsay Monroy es psicóloga clínica en la Unidad de Neonatos del Hospital Roosevelt, según nos manifestó, desde hace un tiempo había tenido la idea de llevar a cabo un proyecto pero por falta de recursos no le había sido posible ponerlo en marcha.
Un día conoció doña Mayra de Oliva —abuelita de Sebastián— quien quería hacer una donación de gorritos. Fue así que Lindsay le preguntó si ella sabía tejer y ella le respondió que sí.
Es por ello que la licenciada le contó su proyecto a doña Mayra quien compartió la iniciativa con su consuegra Flor González quien a través de las redes sociales hizo el llamado a que personas tejedoras se pudieran unir a esta causa.
De este modo surgió el grupo Hilos de Amor GT, en donde participan alrededor de 150 tejedoras. Cada una se unió por distintas causas, ya sea porque perdieron a sus bebés, tienen prematuros o les gusta tejer y ayudar. Las tejedoras son originarias de distintos lugares como:
Gracias a su buena labor, Lindsay también les retribuye a través de charlas virtuales con beneficios psicológicos donde abordan diferentes temas específicos.
«Siempre he pensado que cuando la gente dice «es que yo no tengo nada que dar o no tengo el recurso» yo siempre les digo: tú tienes que ser intencional… sabes que puedes contribuir con tu tiempo, con tus dones, con recursos, pero siempre tienes algo que dar… ayudar de cualquier forma», expresó Monroy.
Nos pareció interesante el saber por qué se usaron pulpos tejidos y cuáles son sus funciones. Lindsay nos dijo que esta iniciativa es algo que ya se hace en países como Dinamarca y España y que tienen una serie de beneficios para los recién nacidos.
Es por ello que nos describió cuál es la funcionalidad de estos curiosos pulpos:
Para elaborarlos se emplea la técnica japonesa amigurumi, la cual permite crear «peluches tejidos». Es por ello que para este proyecto, se hizo una investigación previa para determinar los materiales a usar.
Por lo que estos pulpos se hicieron con hilos hipoalergénicos. Así como también, se tomó en cuenta que el tamaño total para cada uno debía ser de 22 centímetros sin botones ni adornos, con tentáculos cortos y la cabeza de 9 centímetros para evitar que el bebé los pueda extraer.
Así mismo, algo que nos llenó mucho fue el saber que dentro de la cabeza de cada pulpo, las tejedoras guatemaltecas colocaron un corazón tejido porque significa que lo hicieron con todo su amor para los bebés.
Lindsay también indicó que quieren seguir desarrollando este proyecto y llevarlo a cabo al menos 2 veces al año, ya que el hospital cuenta con 6 intensivos distintos para bebés. Por lo que cada recién nacido tendría su pulpo, el cual es regalado para que lo siga utilizando en casa.
Por otro lado, el grupo ya se está preparando para un segundo proyecto donde pretenden hacer gorritos tanto para bebés, niños de pediatría y personas de la tercera edad.
El grupo de Hilos de Amor GT no recibe dinero, pero si tu quieres contribuir con esta noble causa puedes hacerlo donando los recursos como hilos hipoalergénicos o relleno de wata acrílica. De igual modo, si sabes tejer y también quieres aportar tu granito de arena, puedes comunicarte con Lindsay vía telefónica al 4010-4508.
¡Qué Chilero que existan estas acciones que nos demuestran lo solidarios que somos los guatemaltecos!