Básquetbol
La guatemalteca Natalia Larrañaga fue elegida como la mejor jugadora defensiva de la Continental Athletic Conference —CAC— 2022-23 en Estados Unidos.
El talento de la basquetbolista Natalia Larrañaga sigue dando de qué hablar en el deporte universitario de Estados Unidos y en el cierre de temporada 2022-2023, la guatemalteca fue elegida como la mejor jugadora defensiva en la conferencia en la que compite su equipo, la Continental Athletic Conference —CAC—.
Este es el segundo año de la joven jugadora «chapina» en el equipo femenino de baloncesto de Conquistors, de la Universidad Nacional de Florida. Desde su llegada, Larrañaga ha destacado con diferentes reconocimientos individuales, como ser nombrada la Jugadora de la Semana en al menos dos ocasiones.
En el cierre de temporada, Natalia tuvo la oportunidad de ser nombrada como la mejor jugadora defensiva del año de su conferencia, que pertenece a la Asociación Nacional Atlética Intercolegial —NAIA, por sus siglas en inglés—. La guatemalteca impresionó a todos con los números que dejó en la cancha y que le hicieron merecedor del premio.
Fue una de las líderes en robos con un total de 63 y obtuvo un registro de 6.7 rebotes a lo largo de la campaña. También promedió 33 minutos por juego con su equipo, al que además ayudó ofensivamente con una media de 18.7 puntos.
El reconocimiento para Larrañaga no se quedó allí, ya también fue elegida miembro del Primer Equipo de la CAC, el cual está conformado por las mejores jugadoras de todas las universidades que pertenecen a dicha conferencia. Junto a la guatemalteca, fueron seleccionadas las siguientes basquetbolistas:
Luego de ser reconocida como una de las mejores basquetbolista de su conferencia, Larrañaga seguirá con una nueva temporada en el baloncesto universitario de Estados Unidos. La guatemalteca está agradecida y feliz por la experiencia vivida en estos últimos años.
Estas fueron sus palabras tras obtener estos dos premios individuales: «Después de estos años aquí en Estados Unidos creo que ha sido uno de mis mejores años, muchos altos y bajos con el básquetbol, pero fue un año competitivo, y que me hizo enfocar una vez más para lo que queda de la carrera universitaria».
La seleccionado nacional agradeció a su equipo, compañeras y entrenadoras que le dieron la confianza a lo largo de la temporada. No dejó a un lado su familia, que son un pilar fundamental en su vida: «No puede faltar nunca mi familia, son siempre mi razón de actuar. En mi corazón los llevo conmigo, pero en mi consciencia y el crecimiento que ellos han significado creo que es dónde más los amo y más los aprecio»
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