(Foto: El Blog de Valerie)
Dentro de la industria del café, existe un producto nacional que revive la nostalgia a muchos guatemaltecos. En muchas de las tiendas de barrio, La Jarrillita era el café instantáneo preferido.
(Foto: FUDSERVIS)
Lo popular de este producto es que en el sobrecito aparece algo sumamente guatemalteco: la jarra de peltre —material de muchos platos y tazas a precios accesibles—.
(Foto: Amazon)
Además, aparece la cantidad de tazas que puede rendir el producto según cuán fuerte o diluido se quiera el café.
(Foto: Amazon)
Desde hace al menos unas 3 décadas, la Jarrilla se hizo popular comercialmente. Su creadora fue la empresa INCASA, industria guatemalteca dedicada a la producción y comercialización de café soluble instantáneo.
(Foto: I Love Guatemala)
La fábrica se encuentra dentro de la Ciudad de Guatemala, en el kilómetro 6, Carretera al Atlántico Zona 17.
(Foto: Gala Foods)
Cabe destacar que este café está catalogado como un producto de valor agregado, pero de alto consumo en especial para el día a día. De hecho, se pensó como tal considerando que el creador del café instantáneo fue guatemalteco —a inicios del siglo XX—.
(Foto: Cultura Bakery & Cafe)
El sobrecito tiene un contenido de ocho gramos de café soluble instantáneo, dado por su precio y calidad ha sido reconocido a nivel internacional, principalmente en Centroamérica y El Caribe.
(Foto: @PolitiqueroGt)
¡Qué chilero! Un sabor icónico para muchos guatemaltecos que nos lleva de regreso a un momento especial de nuestras vidas.
(Foto: Deka Trading Corp)